Origen: Se trata de una variación del Johnnie Walker Black Label, un blended Scotch whisky compuesto por destilerías como Clynelish (Tierras Altas), Cardhu (Speyside), Cameronbridge y Glenkinchie (Tierras Bajas), con un toque ahumado de Caol Ila (Isla) La particularidad de esta versión es su terminación (finish) en barrica sazonadas con jerez de Jerez (Sherry casks), lo que le aporta una capa extra de dulzor y complejidad

Notas de cata - Vista: Color ámbar intenso, con reflejos dorados y tonos rojizos gracias a su maduración y las barricas de jerez.

Nariz: Aroma sedoso y complejo, con frutas rojas (ciruelas, cerezas, pasas), nueces, caramelo, chocolate y un fondo de roble y humo. También percibe toques de dátiles, higos, vainilla y especias como canela, jengibre y naranja

Boca (paladar) Entrada suave, con frutas secas y dulces (higos, ciruelas), combinadas con cremosidad y especias: canela, clavo, nuez moscada y cierto picor seco por los taninos de la madera

Se suman notas de chocolate oscuro, café, caramelo y frutos secos, con un equilibrio entre dulzor y elegancia

Final Largo, elegante y redondo, con frutos secos, especias dulces persistentes y un toque cálido gracias al jerez También se notan taninos secos y un leve dejo ahumado, con final medio-largo

Temperatura y forma de servicio recomendada: Para disfrutarlo al máximo, se recomienda servirlo solo (neat) o con hielo (on the rocks) También se sugiere acompañarlo con frutas oscuras, nueces o chocolate después de una comida, realzando sus matices dulces.